La vida con múltiples: Marisol

¿Podrías describirnos cómo fue el momento en que os comunican “Vienen gemelos (o trillizos…)”? ¿Qué sentiste?
Lloré como una magdalena. Yo sólo quería un hijo, y ver que eran dos fue un shock... era algo previsible porque era un embarazo por inseminación artificial con estimulación hormonal, pero fue un shock. Luego tienes nueve meses para repensarlo, y a los cuatro ya te has hecho a la idea.

¿Cuáles fueron los principales problemas a los que te enfrentaste durante el parto? ¿Podrías darnos algún consejos para superarlos?
El embarazo fue muy pesado, con la recta final en pleno verano. El parto fue una cesárea programada que yo estaba deseando, porque me aterrorizaba el parto vaginal. Lo único que me habría gustado es que alguien del hospital (Sanatorio de San Francisco de Asís en Madrid) me hubiera ayudado con la lactancia. Nadie, excepto una auxiliar de las que hacen las camas y te limpian, me animó con esto.
El consejo básico a toda embarazada de mellis o más es que se lo tome con calma, que repose, que no tenga miedo a pedir la baja médica en cuanto note los primeros síntomas de agotamiento, que busque a alguien que le ayude durante el resto del embarazo y después, con los niños.

Una vez que nacen toca organizarse. ¿Algún truco para conseguirlo para las futuras madres de gemelos o trillizos?
No cortarse a la hora de pedir ayuda, pero de la de verdad. Pedir que te hagan la comida o te recojan la casa o te pongan una lavadora. En mi caso fui muy afortunada por contar con mi suegro, que sacaba de paseo a las niñas todos los días y que así me permitía ducharme a una hora prudente, hacer comida o incluso sestear. El consejo básico es priorizar: el polvo o los cristales no entran en las prioridades. Las visitas de tomar cafelito no son bien recibidas hasta el mes por lo menos. Si vienes de visita es para ayudar. Y dormir siempre que se tenga oportunidad.

Hora de lactancia. ¿Cómo te apañas para dar de mamar a los dos? ¿y si son más de dos?

Yo no di pecho, di biberones, y resulta agotador: de las ocho de la noche a las ocho de la mañana eran cinco tomas a dos biberones por toma, diez bibes para limpiar y esterilizar. Cuando me incorporé al trabajo, tuve dos horas de lactancia, con lo que andaba más relajada.

Ropa para dos, comida para dos, juguetes para dos… ¿Prefieres todo por igual porque es más cómodo o por que no se peguen, o crees que es mejor diferenciar y que cada uno vaya diferente, tenga juguetes distintos, etc? Por otro lado, el aspecto económico, ¿qué tipo de ayudas, servicios o trucos recomiendas?

Ropa indistinta para las dos. Nunca igual, si podía evitarlo. Acepté toda la ropa que me dieron porque crecen que se las pelan y todo se les queda pequeño enseguida, con lo que es un dineral lo que te ahorras. Juegos, pues dos solamente en caso de bicis, patinetes o muñecas, pero en juegos de mesa, sonajeros, o similares, no, uno para los dos o uno distinto para cada una. Ahora hago hincapié en que deben cuidar los juegos de la otra.
Ayudas: la seguridad social da una, hacienda hasta ahora daba la del cheque bebé y luego depende bastante de la comunidad en la que residas. Dodot y Antonio Puig, Mayoral y algunas otras empresas mandan cosas a familias con partos múltiples.

Hora de ir al cole, ¿juntos o separados? He leído algunas experiencias en el foro y veo que, aunque parece que se recomienda separarles, preferís que la separación sea lo más tarde posible. ¿Qué crees que es más recomendable y por qué?

Las mías van separadas porque yo lo quise así, si no, me tendría que haber peleado con el cole, que por consejo escolar establece que los mellizos han de estar separados. Creo que hay que hacer hincapié en que en esto, como en tantas otras cosas, la opinión de los padres también debería contar, y que nadie como los padres saben lo que sus hijos necesitan. Este verano, en el campamento urbano, éramos dos las madres de mellis: yo pedí que fueran juntas (porque me acabo de separar y ellas están viviendo un momento de tensión como para ir a un sitio nuevo y que las separen y no conozcan a nadie) y la otra madre pidió que fueran separadas porque una era muy dominante. No sé qué base científica tiene el separarlos por sistema, la verdad. Ni sé por qué no se regula desde las administraciones que tiene que ser algo consensuado, pues así se deja a los centros que cada uno haga lo que quiera y tienes que andar de peregrinación buscando "quien te entienda".

Imagino que la crianza múltiple no es nada sencilla y a veces todo se complica al mismo tiempo. ¿Qué haces cuando se te acaba la paciencia?

Buff... gritar, a veces. Respirar profundamente, salir un rato de la habitación. Más que la pérdida de paciencia es el agotamiento el que te lleva al extremo.

Resúmeme en pocas palabras o frases, cómo ha sido y es vuestra experiencia personal desde el embarazo, pasando por el parto al después, cuándo ya empiezan a crecer y hacerse personitas de 3, 5, 7 años…

La experiencia es estupenda: te permite ver cómo cada niño es un mundo y que cada uno aprende a hacer las cosas en un momento distinto. Esto te hace relativizar la falta de avances de uno y otro. Sabes que lo hará, tarde o temprano, porque ya una adelantó a otra en otra cosa y viceversa. Es también un poco una montaña rusa: el comienzo es infernal, agotador a más no poder. De pronto empiezan a espaciar tomas y a dormir y tú te vas relajando, hasta que empiezan a salirles los dientes y/o a gatear y vuelves a dormir poco, y a no estar tranquila en casa. Sobre todo es muy especial ver cómo se relacionan, cómo se quieren, cómo se cuidan. En la guarde mi hija Silvia le preguntaba a su hermana Eva si había comido bien.
Haría hincapié en varias cosas:
1. El empeño en que se programen cesáreas por sistema con partos múltiples. Está demostrado que es posible parirlos vaginalmente, y habría que dejar que la naturaleza siguiera su curso, o al menos preguntar a la madre qué prefiere. Además así se evitaría el nacimiento de niños con bajo peso, estancias en neonatos y demás.
2. Habría que apoyar más la lactancia materna en estos casos, con ayudas a domicilio si fuera necesario. Es una pasta la que se ahorra en botes de leche y un beneficio para los niños. Pero sin apoyos es complicado.
3. Habría que establecer un método para que los los colegios admitieran que haya padres que prefieren a sus hijos juntos. Dos niños que entran en Infantil 3 años son dos desconocidos para los profesores a los que les toque, y no deberían juzgar, sin conocerlos, que deben ir separados por narices. ¡Que son niños! Y muy peques. A nadie le gusta separarse de sus seres queridos.

Marisol, madre de dos mellizas de cinco años.

Para leer otros cuestionarios, busca en la etiqueta "La vida con múltiples" en la parte derecha del blog. Gracias.